“Los nudos del cabello se deshacen peinándolo y los de la garganta llorando”.

¿Cómo deshacer diferentes tipos de  nudos?

En realidad, muchas veces el nudo es más lo que parece que lo que es, y si nos detenemos con un poco de paciencia y siguiendo estas sugerencias podemos deshacerlo.

 “La  vecina rubia”, el boom de las redes sociales españolas dice en su twitter  que los nudos del cabello se deshacen peinándolo y  los de la garganta llorando.  Bien! Ahora ya sabemos cómo deshacer dos tipos de nudos .Sigamos con otros nudos .Los nudos de las cadenitas se deshacen con una gotita de aceite de oliva, y los   del cuello  soltando la terquedad y la rigidez del pensamiento. Si  sientes tu cuello muy contracturado  recuerda el  precepto del señor Brown , el maestro de Wonder:“Cuando puedas elegir entre tener razón o ser amable, elige ser amable.”

Los nudos de la espalda se deshacen pidiendo apoyo y ayuda, y los mentales se sueltan respirando, respirando y respirando.  Si tienes a menudo esos fuertes dolores de cabeza recuerda que los nudos mentales son acumulación de pensamientos, muchos pensamientos  y también de algunas emociones .A  la  auto-exigencia, los juicios y las auto-criticas  les gusta acumularse  en tu frente sobre los ojos. Porque te criticas y te exiges tanto? Durante muchos años sufrí de migrañas, créeme que se de lo que estoy hablando, hasta que aprendí esto: El estrés es miedo .Te sientes estresado porque estas asustado. 

Cada vez que te sientas así pregúntate ¿Qué me está asustando? Luego respira profundamente y llena tu mente de pensamientos de aceptación y confianza en que todo está y estará bien .Deja de preocuparte y dale permiso a Dios para que se ocupe del asunto. Darle permiso a Dios no es decirle todo lo que tiene que hacer y cómo nos gustaría que lo haga .Es soltar y confiar en su amoroso plan divino. 

Como indican los fundamentos básicos del Ho oponopono, el arte ancestral hawaiano de sanación y auto-conocimiento , soltar es dejar en reposo aquellos temas o preocupaciones que no sabemos cómo resolver y confiar en  Dios para que tome cartas en el asunto. Antes, claro, hay que confiar. Cuando hacemos esto estamos soltando la preocupación  y el nudo. Soltar no es resignarse, sino darle el control y permiso para actuar a Dios en lugar de seguir pensando y pensando con nuestro intelecto. Ser humilde y decir:” yo con esto no puedo, por más que me preocupe y piense, no logro resolverlo. Entonces suelto y confió en Dios”.

En el caso de que el nudo cualquiera sea, esté más apretado o no notes movilidad alguna en el mismo, aplica sobre él una gotita de humor ,  muchos litros de gratitud ,buena música , y un poco de aire .Sal a caminar, acaricia una mascota , mira el cielo, una flor o lo que tengas de la naturaleza a tu alcance. Cuenta tus bendiciones, agradece lo que tienes. Al decir “gracias” estas parando esas historias que te estás contando en tu mente todo el tiempo que te dejan intranquilo. Lo que logras al decir un simple gracias es volver al presente, estar en el aquí y ahora, que es el único lugar donde uno puede estar en paz y feliz.

Recuerda que Soltar y confiar, es la clave. Al hacerlo notaras que de a poco  el nudo acaba cediendo,  y vuelvas a sentirte libre.

Con mucho cariño 

                          Mariana de Anquin